¿Qué causa que un vehículo derrape por las ruedas traseras?
El derrape de las ruedas traseras suele producirse cuando perdemos adherencia en una curva o en superficies deslizantes, como asfalto mojado, hielo o grava. También puede ocurrir al acelerar bruscamente o tomar una curva a mayor velocidad de la adecuada. En estos casos, la parte trasera del coche tiende a desplazarse lateralmente, provocando lo que se conoce como sobreviraje.
Una presión inadecuada en los neumáticos, el mal estado del firme o incluso un reparto de carga incorrecto también pueden aumentar el riesgo de este tipo de derrapes.
¿Cómo actuaremos si nuestro vehículo derrapa?
Cuando el coche empieza a deslizarse de atrás, lo peor que puedes hacer es frenar bruscamente o girar en sentido contrario por puro instinto. Si un turismo derrapa se debe frenar solo si es necesario y siempre con mucha suavidad, pero hay otras prioridades antes.
Por eso, si te preguntas cómo actuaremos si nuestro vehículo derrapa, la respuesta correcta incluye tres claves: no perder la calma, actuar con suavidad y anticiparte al movimiento del coche para acompañarlo, no forzarlo.
Cómo se debe actuar cuando las ruedas traseras derrapan: pasos clave
El objetivo es recuperar la tracción sin poner en peligro la estabilidad del vehículo. Aquí tienes el paso a paso que debes seguir:
Mantener la calma y no frenar bruscamente
En un derrape trasero, frenar de golpe puede hacer que las ruedas se bloqueen y el coche gire sin control. Lo primero es mantener la sangre fría. Suelta el acelerador de forma gradual y céntrate en mantener el volante firme.
Girar el volante en la dirección del derrape
Puede sonar contradictorio, pero si la parte trasera del coche se va hacia la derecha, debes girar el volante hacia la derecha. Este movimiento acompaña el derrape y ayuda a alinear el vehículo con la dirección de marcha. No hagas giros bruscos; los movimientos deben ser suaves y precisos.
Recuperar el control progresivamente
Una vez que el coche empiece a responder, vuelve a enderezar el volante poco a poco y evalúa si puedes continuar sin riesgos. Si llevas ayudas electrónicas como el ESC (control de estabilidad), es posible que el sistema corrija parte del derrape por sí solo, pero no debes confiar únicamente en la tecnología.
¿Qué hacer si el derrape es fuerte o incontrolable?
Si el derrape es tan intenso que no puedes estabilizar el coche, prioriza tu seguridad. Intenta reducir la velocidad sin bloquear las ruedas y dirige el vehículo hacia una zona segura fuera de la calzada si es posible.
Recuerda que, ante situaciones de emergencia, cada segundo cuenta. Por eso, llevar una baliza V16 conectada como Help Flash IoT puede marcar la diferencia si tienes que detenerte tras un derrape. No necesitas caminar por el arcén para ir a colocarla, como los triángulos, y además activa la señalización en el punto exacto del incidente mientras te conectas con la DGT.
Saber cómo se debe actuar cuando las ruedas traseras derrapan no es solo cuestión de reflejos, sino de tener claro qué hacer en el momento crítico. Practica estas maniobras en zonas seguras si tienes ocasión, mantén tu coche en buen estado y apuesta por elementos que te ayuden en caso de emergencia, como Help Flash. Con prevención y preparación, estarás mejor equipado para reaccionar con seguridad.